Fonética y Fonología

La Fonética es una rama de la Lingüística y estudia los sonidos del habla humana. El término es utilizado también para las lenguas de signos, donde estudia los gestos y la composición visual de los signos.

La fonética se ocupa de la producción física, transmisión y percepción de los sonidos. Por otra parte, la Fonología trabaja con los rasgos comunes de los sonidos dentro de una lengua. Aquí el fonema es de crucial importancia. Los fonemas son unidades perceptuales que constituyen los ladrillos para construir las palabras (habladas o escritas) de una lengua.

Transcripción

La transcripción fonética es una forma de representar los sonidos que aparecen en las lenguas humanas independientemente de la forma en la que estén escritos. El sistema más conocido es el Alfabeto Fonético Internacional (AFI), basado principalmente en el latín puede transcribir cualidades del habla tales como consonantes, vocales y cualidades suprasegmentales. Fue creado por la Asociación Internacional de Fonética para representar de forma estandarizada los sonidos del habla humana. El AFI es utilizado por lexicógrafos, estudiantes y profesores de lenguas extranjeras, logopedas, lingüistas, cantantes, actores, creadores de lenguas construidas y traductores.

La tabla oficial del AFI de 2005 (licencia CC-BY-SA)

Relación entre fonos y fonemas

El fono es la unidad básica del sonido para el habla humana; el fonema es la unidad básica del sonido para lenguas específicas. Un fonema es una unidad abstracta para una lengua dada e incluirá un número diferente de fonos. Esto se refleja en los diferentes niveles de transcripción. El propósito de la transcripción fonética )(normalmente entre corchetes) es transcribir sonidos (fonos) para establecer su articulación exacta, mientras que la transcripción fonológica (normalmente entre paréntesis) transcribe las palabras según estén categorizados en una lengua dada. Los límites entre transcripción fonética y fonológica no están siempre muy claros - una transcripción fonética estricta capturará más variaciones en los sonidos mientras que una transcripción fonética amplia capturará solo los rasgos más visibles y se mezclará con la transcripción fonológica.

Por ejemplo, la pronunciación común de la palabra inglesa podría ser transcrita estrictamente como [ɹ̠ʷɛd] donde [ɹ] es la "americana" (un aproximante alveolar), que con el signo menos debajo, muestra que es retraída ( se produce en la boca mas atrás de lo habitual) y [ʷ] señala la labialización (los labios están ligeramente redondeados). Una transcripción amplia podría ser simplemente [ɹʷɛd] (sin marcar la retracción) o incluso más amplia [ɹɛd], pero la transcripción fonológica sería solo /red/, sin mostrar las posibles variantes de la /r/.